Vivir en las palabras es tan difícil
como vivir fuera de ellas en estos días
en que estás pero no estás, aquí y allá

quiero decir salís de la cama como recuerdo
y entrás al poema me escribís

y lo peor es que no mentís
me dolés porque nunca llegás tarde a la verdad
tan dulce como eras

ay! quisiera abrazarte, volverte a besar
despejarte otra vez en un soplo del silencio.

Qué dice lo que no dice el agua
un día como hoy por ejemplo que salpicó la ventana y
dejó gruesas manchas de tristeza y el viento no se la llevó
ni quiso hacer llover diluviando
al menos que vinieras
y nos digas cosas como
yo te amaba tanto pero qué mal día el de hoy
y el de ayer no sabré vernos así ó
no extrañaría tus manos si no fuese de noche ó
te recuerdo ahora cuando pasaré debajo de aquél árbol ó
cuánto faltaba para el olvido.

Tierramente.

desnudo sobre tu cuerpo, la vida tiene otro color
nace un nuevo color
debajo del cielo
descubro un color de cielo perplejo, nuevo
desconocido, descolorido, sediento de color

y te encuentro
bajo este cielo claro
que duerme y nos ampara
desierto, pausado

y se me hace boca la agua
deliberadamente
agua desnuda y colorida sobre tu cuerpo moreno, rojiblanco
cielamente descalzado, coloriento

abrime, abrime vos el barro de color
que la tierra tiene para mí.

¿y adónde ir a morir de amor y de odio y de miedo
sino a mi otra memoria
que abre los ojos a tu cuerpo
recostado sobre mayo como otro color que sangra?